se que nunca fuimos y quizás nunca seremos,
por eso; no hay heridas que deban cicatrizar,
ni peleas, ni reconciliaciones, ni dolores que borrar.
Tuvimos una primera cita en una pecera rodeada de gente,
donde te confesé toda mi vida,
hubo un primer beso a la luz de la luna llena,
la misma luna que hoy me recuerda que nunca estuviste aquí.
Escuchamos muchas canciones,
escribimos historias y versos de amor,
nos pintamos en la piel caricias que nunca nos dimos,
pero que deseamos con todo nuestro ser.
Comimos pizza y nos besayunamos unas cuantas veces,
caminamos tomados de la mano,
tomamos café y té chai, recorrimos una librería
e imaginamos mil y un lugares por visitar.
Te leí 3 historias mientras te veía dormir,
tú me cantabas bajito mientras yo suspiraba,
nos regalamos miradas furtivas, miradas de amor,
miradas que solo tu y yo entenderíamos.
Tuvimos 83 días de conversaciones, 2 días tristes,
un ciento de mensajes, 50 desayunos compartidos,
20 baños matutinos y un sin fin de "te quieros" correspondidos.
Después de todo esto, ¿Porque querría olvidarte?.
La verdad es que no se me da la gana olvidarte, voy a seguirte queriendo un rato más.
— GisMar (@Ella_Luna_) Mayo 14, 2014
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